Hoy posteo un requiem hacia una parte muy especial de mi vida: Mis tenis rojos. Desgraciadamente recuerdo cuando los compré pero eso no es lo que importa, lo importante es que desde hace un año me acompañaron en mi día a día, daban calor a mis pies chuecos y eran rete chéveres.
Los compré porque cuando los vi fue amor a primera vista, estubieron conmigo cuando las cosas no iban bien, estuvieron conmigo en el, hasta el momento, mejor viaje que he hecho nunca, no me abandonaron cuando todo era una montaña rusa. Si, lo acepto, al principio no nos llevabamos bien, me lastimaron y me sacaron sangre y aún así los seguí usando hasta que me aceptaron.

¿Cómo tirar algo que significa tanto para mi? No se puede; simplemente no hay manera...
Ahora ya están en sus últimos momentos, cada vez que me los pongo me pregunto si será la última. Hoy los usé, no sé si ya es momento de jubilarlos, pero al quitarmelos mis dedos chuecos me dijeron que ya no están cómodos, que necesitan algo mas confortable... en pocas palabras, ya no los quieren. Sin embargo, algo dentro de mi me dice qeu los conserve aún; hay tantos recuerdos, malos, buenos y regulares que no es posible desechar eso así tan fácil.
Sé que seguiran conmigo, pero no sé si todos los días podrán recibir nuevas energias...
GRACIAS POR TODO ;__;
no loos tires yo guardo los mios y me los puse hoy solo en cocasiones ellos tanbien estuvieron conmigo en muchas faces de mi vida hasta en la prision los tengo desde hace años unke no oos uso nomas unas veces al año
ResponderEliminar